Es común que nuestros hijos biológicos no sigan nuestros pasos y así un renombrado médico tiene experiencia y conocimientos para heredar... a su hijo abogado que quizá dentro de un par de décadas corra la misma suerte.
También es cierto que dependiendo qué es lo que se hereda tenga más o menos probabilidades de que alguien continúe con el legado, el coleccionista es alguien que no encuentra fácilmente quien le suceda y continúe su obra, actualmente por la abundancia en la comunicación encuentra pares con más facilidad pero en el pasado no era tan sencillo.
Imagínense un "auto modellbaus" en los años 60s, no existe internet, no habría posibilidades de que tenga un espacio en TV y en radio sería algo frustante, nos queda el papel, pero una revista exige además de material mensual sponsors y no era algo para preparar en casa, ya que absolutamente todo era costoso, desde una foto a revelar, edición y una interminable lista de cosas a pagar... Así resulta a fin de cuentas el libro como el soporte más adecuado.
Lindo sería que un coleccionista de aquél entonces se hubiera animado a hacer un libro y uno leerlo aquí y ahora. Descubriendo cómo se vivía en aquel entonces el coleccionismo, cómo conseguían los modelos y demás... De tener el mismo no sólo tendría el antecesor de auto modellbaus sino el de todo coleccionista de modelos que comparte su colección por internet... estaríamos hermanados y adoptados por aquél antecesor común que se dió maña para burlar el tiempo y encontrar decendencia digna. Nuestro propio Walt Disney freezado, nuestro tutor...
Y como hoy es el Día del Padre, les digo sí, lo tengo:
Tapas duras enteladas, tipografía dorada en relieve, un lujo de otros tiempos que otorgan solemnidad a nuestra actividad de años.
En términos eclesiásticos sería nuestro Viejo Testamento, no les voy a mentir, gusto de posar en fotos con el libraco en mano con todo orgullo.
Data del año 1967, antecede el natalicio de tantos, contemporáneo a la infancia de tantos otros... Si uno compraba el libro en aquél entonces, en el negocio del lado encontraba los tesoros de la antigüedad de hoy vendiéndose de manera regular.
Por cierto nuestros paladines del tiempo son Jaques Greilsamer y Bertrand Azéma, la experticia en que llevan el libro hace pensar en una máxima probada: No se puede hablar de coleccionismo sin ser coleccionista.
Curiosamente el libro comienza con una entrevista entre Jean-Pierre y Alain, otros coleccionistas en amena charla que brinda a las hojas siguientes la distensión necesaria para estos temas. Algo así como que me pongan a hablar pavadas con El Gaucho antes de un catálogo minichamps y lo lean dentro de 50 años.
Por que lo que sigue es un extenso archivo de modelos, por ésos años, ya tenían reproducciones añosas y de vanguardia (como ahora) pero uno quiere ver todo.
Ver esos modelos despojados predisponen al lector a clavar codos en la mesa, hacer puños con las manos y enterrarlos en los cachetes para mirar horas, quizás las mismas que uno se sentaba a escuchar las andanzas del abuelo o los del propio padre ya entrado en años.
Reencontrarse con los detalles y descubrir que el apetito por los mismos son desde el primer momento, que un autobús en escala siempre fué y será algo fuera de lo común...
Que las aventuras de un colega por tener modelos exclusivos tienen un pasado remoto y que la inspiración tiene una sola fuente de la que todos tarde o temprano bebemos... la foto de arriba, hoy sería un gauchomodel...
Y quién fué el poseedor de ésta maravilla hoy se estaría descostillando de la risa al ver nuestro "progreso"
Pero mis palabras empiezan a sobrar, voy a pasearlos un poco por las siguientes imágenes para que imaginen su propio antepasado contándoles cómo eran antes las cosas...
La vitrina del abuelo? Quizá la historia obligue a ser mas humildes a unos cuantos fanfarrones que se ven en la actualidad...
En algunos pasajes del libro ofrece fotos a color, curiosamente los modelos más "sabrosos" para mi gusto están en blanco y negro...
Llegando a las páginas centrales hay un pormenorizado catálogo del momento, uno puede imaginar marcas conocidas y se prepara...
La primera sorpresa es que el primer criterio para ordenar es el país de procedencia... Ni se imaginaban que hoy sería totalmente inútil... Tendríamos que hacer un catálogo de autos chinos.
Minucioso, cartesiano y sistemático catálogo, son hojas y hojas de rigurosos datos muy importantes en el presente, como saber la antigüedad de un modelo... en la columna de la derecha la escala precisa...
España empieza con la marca Anguplas... el anterior dueño del libro al parecer tenía interés en la misma... respeté el papel amarillento en su lugar...
Viejos conocidos de siempre...
Incluso uno busca algunos modelos que tiene y efectivamente los encuentra, como mi 403 Cabriolet de Solido...
Seguimos con las fotos? Pues sí... Si se pensaba que conseguir una Estanciera resultaba difícil, les puedo pasar los datos de OTRO fabricante que la hizo... PERO ES MAS DIFICIL CONSEGUIRLA:
Y que hacía de interesante Anguplas... Sigamos con más fotos..
El libro se cierra y queda la sensación de que la visita llega a su fin, besos, abrazos y promesas de una próxima, al menos cumplo en este invierno de volver a ver sus páginas cada tanto y saludo en nombre de todos a nuestros antecesores y mentores coleccionistas...
